Desde su legalización en 2017, el cannabis ha tenido que transitar por dos vías en México, que han avanzado con reglas propias, velocidades distintas y obstáculos variados. Con la entrada en vigor del Reglamento para los usos medicinal y de investigación del cannabis, en la primera quincena del 2021, se completó la primera etapa de una de las vías.
Pero ¿Qué sigue para la regulación en México y cuándo podremos hablar de una completa legalización del consumo de cannabis?
La regulación del uso medicinal del cannabis cumple con una exigencia de miles de pacientes en México que buscaban acceder de manera segura y legal, a tratamientos para tratar diversos padecimientos sobre los que el cannabis ha demostrado tener un impacto positivo. Al mismo tiempo, abre las puertas para que instituciones médicas y académicas, públicas y privadas, valoren desarrollar programas de investigación sobre potenciales aplicaciones de la planta, que debidamente sustentados, puedan convertirse en medicamentos con beneficios para pacientes dentro y fuera de nuestro país.
En este rubro, sin embargo, hay pendientes que atender desde el gobierno y la iniciativa privada:
1. Generar los canales de comunicación necesarios para atender las necesidades reales de pacientes, principales impulsores de todo el movimiento.
2. Desarrollar y acercar programas para que los pequeños y medianos empresarios del campo, puedan acceder a las necesidades y requerimientos de esta nueva industria.
3. Apoyar la creación de cadenas de valor que signifiquen un diferencial competitivo de nuestro país, desde el campo hasta el consumidor final, dentro o fuera del mercado mexicano.
4. Generar los vínculos necesarios entre la academia, industria y gobierno para avanzar juntos en la creación de un entorno para la generación y difusión del conocimiento.
La segunda vía para el cannabis en México es la Ley Federal para la regulación del cannabis, que fue aprobada en el mes de octubre del 2020 por el Senado y que actualmente se mantiene pendiente de discusión y aprobación en la Cámara de Diputados.
Tal como lo hicieron los Senadores en dos oportunidades, la Cámara baja solicitó una prórroga a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para cumplir con el mandato de legislar sobre el tema.
Abordar una Ley de cannabis que contiene la creación de un organismo regulador, el autoconsumo, las cooperativas cannábicas y otros puntos sobre el consumo adulto, no es tarea fácil y menos, tratándose del último periodo de sesiones ordinarias del Congreso, antes del proceso electoral que se llevará a cabo el próximo 6 de junio y que renovará en su totalidad la Cámara revisora.
A partir del 1º de febrero, se reanudarán las actividades en ambas Cámaras del Congreso y se tendrá como primera tarea, asegurar que el cannabis sea incluido entre los puntos prioritarios de la agenda para que se pueda continuar con el debate. Teniendo como base este escenario completado, existe la posibilidad de que haya modificaciones en el texto aprobado y por ello, tenga que regresar al Senado para ser aprobado.
De esta forma, se multiplican las actividades de la industria organizada que busca continuar aportando elementos al debate de la regulación en México. Hoy existen actores concretos y nuevos procesos que delinearán los retos y oportunidades del naciente mercado mexicano.